Leo de la Rosa Meran, el religioso evangélico arrestado por producción e intento de producción de pornografía infantil contra dos menores de 17 años, carece de abogado y solicitó que se le cualifique para ser representado por un defensor público.
La información surgió este miércoles en la mañana, cuando estaba pautada la vista preliminar y de fianza contra el predicador ante la magistrada federal Camille Vélez Rivé.
Esposado de pies y manos y con mameluco de preso color crema, De la Rosa Meran, de 45 años, habló con su esposa Minera y su secretaria para ver a qué abogado contrataban. No obstante, luego de la conversación, le manifestó a la secretaria de sala que quería cualificar para ser representado por la Oficina del Defensor Público Federal.
"Se ha dicho mucha mentira y mucha basura. Pero nosotros sabemos en quien hemos creído y nuestro Dios va a levantar banderas. Nuestro Dios es un ser real y poderoso y Dios sabe que le hemos creído a él", expresó visiblemente molesta la esposa del pastor acusado a Las Noticias (Univisión).
La vista fue pospuesta para el viernes a las 9:30 a.m., cuando se determinará si se le asigna un abogado del panel, de no contratar a un abogado.
Confían en su inocencia
"Él no es un hombre cualquiera. Dios nos dará la victoria. Son 20 años de conocerlo. Dios nos dará la victoria. Usted verá que nos la va a dar porque Dios no nos deja en vergüenza", dijo fuera de sala Yanique Ureña, una feligresa de la Iglesia Cristo Palabra de Poder, donde De la Rosa Meran predicaba.
"Esa lágrima que nosotros hemos bota'o por Leo, usted verá dónde va a llegar, que Dios nos va a dar la victoria bien grande en el nombre de Jesús", agregó Ureña, quien alegó que las presuntas perjudicadas no van a la iglesia de Río Piedras.
Rafael Morales se identificó como amigo de De la Rosa Meran y dijo que estará con él "hasta el último día".
Los feligreses aclararon que el acusado no es pastor porque no tiene una iglesia fija, por lo que se le conoce como predicador.
Según la denuncia, De la Rosa Meran, del Ministerio Sanidad Completa, sostuvo conversaciones sexualmente explícitas con dos adolescentes de 17 años, y una de ellas grabó las mismas.
Además, se le imputa haberles enviado fotos de él desnudo, específicamente de su área genital, y de pedirle a las menores fotos de ellas desnudas. Una de las perjudicadas llegó a enviarle fotos desnudas de ella, según la acusación.
El religioso fue arrestado el viernes y permanece en el Centro de Detención Metropolitano de Guaynabo. De resultar culpable, se expone a una pena de cárcel de entre 15 a 30 años.
