Los efectos de la fama, Martha heredia

Los efectos de tener fama de forma repentina. LA FAMILIA DE LA PERSONA FAMOSA SOPORTA LARGAS AUSENCIAS Y EL ASEDIO DE LOS MEDIOS INFORMATIVOS

Cacaocity, Nacionales.-De un día para otro, la joven Martha Heredia Rivas amaneció envuelta en el manto de la fama. Al cubrirla el reconocimiento público su rostro se hizo familiar para la gente. Y de ahí en adelante, la mariposita tatuada en su piel es tan conocida como el plátano con salami.

La muchacha de dieciocho años ganó un concurso seguido por diversas naciones latinoamericanas. Ella viajó como un pasajero más y regresó pisando el Palacio Nacional, donde la recibió el mismo Presidente de la republica Leonel Fernandez.

Al ganar el Latin American Idol el cambio de vida de la joven cantante fue veloz. Su madre, Maritza Rivas no quería regresar a su casa en la avenida Yapur Dumit de Santiago, no por altanería sino por residir en un primer nivel y sentirse asediada las 24 horas. Actualmente vive con Martha en un hotel de Santo Domingo.

Que antes pasara desapercibida y ahora ande rodeada y vigilada por mucha gente es una de las variaciones a la vida de una persona, luego de ser arropada por las vestiduras de la fama.

Hayddé Domínguez, psicóloga clínica, expone que la alteración de la rutina propia no necesariamente implica sufrimiento, pero sí implica pérdida de intimidad, pues aparte de andar custodiada, la gente le cae encima y la vida de la persona “comienza a ser cuestionada” al aflorar detractores gratuitos que comentan defectos naturales en los humanos. Según la experta, lidiar con este aspecto de la fama amerita mucha inteligencia emocional por parte del individuo ubicado en la mirilla pública.

El lado bueno o positivo

Aún los humoristas que saborean la miel del éxito no andan de risas todo el tiempo. Saberse famoso, aceptado, popular y admirado por la bolita del mundo tiene aspectos positivos y negativos a valorar. Siendo optimistas, iniciamos citando las luces de la aprobación pública.

Parte de lo provechoso es que el talento sale a la luz pública, y acarrea mucha satisfacción emocional el que avalen lo que sabes hacer y que sea disfrutado por los demás. Otro valor, de acuerdo con Domínguez, es la apreciación desmesurada, las muestras incondicionales de respeto por parte de las personas cercanas, lo cual no tiene precio.

“Cuando los demás nos refieren su cariño, nuestro estado emocional mejora, el sentirse amado y más por una nación es una de las experiencias humanas más reconfortantes y buscadas”, afirma.

Un aspecto que infla las mejillas de la contentura es la mejoría en la economía. Una carrera artística ascendente es florida en billetes y en poco tiempo se consigue lo que a la mayoría le cuesta una vida. Así, la fama bien aprovechada facilita la adquisición de bienes inmuebles, autos modernos, villas, buena comida, ropa de marca y caminatas a destinos que hasta ese momento sólo apreciaba en televisión.

Negativo

Lo adverso es que, sobre todo en adolescentes, la falsa apariencia de éxito se relaciona casi siempre con dinero fácil y felicidad. Por ello añoran ser cantantes, actrices o modelos con tal de alcanzar el trillado “sueño”.

Según Domínguez, el problema es que no están bien informados sobre lo que envuelve el bultico de la fama. Y entre las sorpresillas y novedades que trae, la psicóloga cita los cambios de imagen con los que no necesariamente estarás de acuerdo, alimentación distinta, rutinas de ejercicio físico, porque “la apariencia ya no es exclusivamente tuya, sino que hay una fanaticada esperando que satisfagas su necesidad de apreciación y la imagen en el medio ambiente artístico es decisiva”.

Los principios y valores con los que una persona creció pueden tambalearse ante la fuerte presión social de los manejadores interesados en publicitar, ante todo, la imagen. Y cobrar por eso.

Las malas influencias no quedan fuera del capítulo. Según Domínguez no hay garantía de que las personas del entorno de la “estrella”, tengan siempre las mejores intenciones. A su juicio, el interés económico prima en el negocio, “aparte de que es conocida la abrumadora presencia de personas adictas a sustancias psicoactivas, pornografía, carentes de valores”.

CONSEJITOS PARA ASUMIR EL CAMBIO

Para cualquier persona en camino al foco público, la psicóloga clínica recomienda mantenerse apegada a su familia, saber qué indican los contratos a firmar y entender que la vida tendrá modificaciones que obligan a cultivar disciplina y discreción, porque todo cuanto haga será noticia.

Para salir vivos de la avalancha, la familia debe saber que el costo emocional de la fama es soportar ausencias prolongadas de la artista amada, sobre todo en fechas especiales, así como atender a reporteros y posponer planes de importancia en el hogar.

Otro detalle tiene que ver con los “paracaídas” o gente lejana que se pega para ver qué le toca. Este hábito, bastante común, se debe a que cualquiera quisiera un pedacito del pastel, o sea, “ser saludado por ella, ser mencionado en alguna entrevista, en fin, tener también reconocimiento y aprecio del o la artista”, expuso Domínguez. Este gusanillo de reconocimiento y exclusividad respira en mayor o menor medida en todos los seres humanos.

Una sugerencia es procurar asesoría para intensificar la inteligencia emocional o la capacidad de reconocer, manejar y controlar los sentimientos, para ñadiciona la experta- saber qué decir, persistir frente a las decepciones, controlar los impulsos, regular el humor.