Guzmán Fermín: ¿inepto, mentiroso o ambas a la vez?

Con el Jefe de Policía no pasa nada. Guzmán Fermín no será cancelado, ni mucho menos irá preso como corresponde, porque resulta que, como la gatica de María Ramos, cobardemente esconde la mano que ejecutó las órdenes y que dieron como resultado una chapucería sin limites en esa versión de los tristemente históricos intercambios de disparos

POR IVONNE FERRERAS / Quisqueyadigital.com
CACAOCITY, OPINION.-Con la misma prisa con la fue sacada de escena la representación circense en la que el Jefe de la Policía se convirtió en la atracción principal por las “payasadas” realizadas en la historia del ¿secuestro? de Eduardo Baldera Gómez, se pretende dejar pasar, así, sin pena ni gloria, el informe que emite la Procuraduría General de la República en torno al caso, como una confirmación de lo que, en su momento era un secreto a voces.

El informe confirma que Guillermo Guzmán Fermín es un mentiroso, que le mintió al país cuando dijo con toda la espectacularidad posible que Cecilio Díaz y Jesús Batista Checo murieron en un intercambio de disparos, cuando la verdad es que fueron asesinados a sangre fría en una acción criminal que consternó a toda la sociedad, en violación a lo estipulado por la ley.

Como si fuese un vedeto, Guzmán Fermín hizo todo un montaje con el que pretendio lucirse a través de los medios de comunicación, anunciando con bombos y platillos, que los vinculados al supuesto o real secuestro habían muerto en un intercambio de disparos, versión que fue posteriormente desmontada por Quisqueyadigital.com y otros diarios, cuando le presentaron las fotos de Jesús Batista Checo en momentos en que fueron apresados por la patrulla a las órdenes del cuestionado jefe policial, sanos y salvos.

Y son precisamente éstos agentes, a quienes el Jefe de la Policía ensalsó hasta el cansancio por el trabajo realizado, ascendiendo el rango, a los que pretenden echarle la cuaba por la mentira descubierta.

Con el Jefe de Policía no pasa nada. Guzmán Fermín no será cancelado, ni mucho menos irá preso como corresponde, porque resulta que, como la gatica de María Ramos, cobardemente esconde la mano que ejecutó las órdenes y que dieron como resultado una chapucería sin limites en esa versión de los tristemente históricos intercambios de disparos.

Ahora, simplemente, en caso de que se le inquiriése, se limitaría a decir, quizás, que es una víctima de la desinformación. Pero, de ser así, definitivamente estaríamos frente a un oficial de policía que, para el puesto que ocupa, es terriblemente inepto, descaradamente mentiroso o ambas cosas a la vez.

Al parecer, a Guzmán Fermín le salió el tiro por la culata y aún cuando al “cirujano” se le murió el enfermo al intentar curarle una pierna cuando el proyectil le había atravesado la cabeza, el jefe de la Policía, aunque vivo, se mantiene en estado comatoso. Lo mantienen en ese estado, todas las preguntas sin respuesta, a pesar de sus especiales conexiones al poder civil.