Una fuente estrechamente vinculada al Sindicato Unido de Trabajadores de Falconbridge Dominicana, reveló que la decisión tomada por la Gerencia es irreversible.
Antes de anunciar el cierre de sus operaciones en Loma La Peguera, por la baja de los precios del níquel en el mercado internacional, la multinacional contaba con 700 trabajadores.
En los próximos meses serían puestas a la venta en pública subasta, equipos pesados y livianos utilizados en las operaciones de la compañía de capital extranjero.
La empresa busca que el Gobierno Dominicano a través del Ministerio de Ambiente le otorgue el permiso de explotación de los yacimientos concentrados en Loma Miranda.
Este pedido ha encontrado la resistencia de la iglesia católica, ambientalistas, grupos populares, comunitarios de las provincias Monseñor Nouel y La Vega.
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