Santiago. -El presidente Danilo Medina y la primera dama, Cándida Montilla de Medina, dejaron iniciados los trabajos de construcción del Centro de Atención Integral para la Discapacidad (CAID), en esta provincia, el segundo que levanta el Despacho de la Primera Dama.
El primero de estos centros destinados a la atención de niños de entre cero y diez años será inaugurado en las próximas semanas y está localizado en la avenida Luperón, casi esquina Enriquillo, en el municipio Santo Domingo Oeste.
Al pronunciar las palabras centrales del acto, la Primera Dama agradeció a Dios la oportunidad de trabajar a favor del desarrollo integral de la niñez dominicana en condiciones especiales.
“Como lo he reiterado en diversas ocasiones, desde hace un buen tiempo el Presidente de la República y quien les habla, hemos tenido muchas preocupaciones sobre la necesidad de construir un centro para ayudar en el desarrollo integral a la niñez en condiciones especiales, por eso al día siguiente de llegar al gobierno, se estableció como un proyecto de nación, la construcción del Centro de Atención para la Discapacidad (CAID)”, puntualizó Montilla.
Asimismo, anunció que en los próximos días viajará a Lima, Perú, para firmar un acuerdo de cooperación interinstitucional con el Centro Ann Sullivan de esa nación sudamericana; un modelo educativo exitoso y referente obligado en los servicios que brinda a personas con necesidades especiales.
Precisó que el CAID constituye un espacio integral con los más altos estándares internacionales, donde los niños especiales podrán tener un desarrollo autónomo que fortalezca sus capacidades y habilidades, para lograr una vida con calidad y dignidad; lo que, según entiende, les permitirá alcanzar la realización personal y contribuir con su participación en las actividades sociales, educativas, laborales y culturales.
En ese centro, los niños recibirán atención básica, a partir de una evaluación médica para perfiles específicos que orientarán la aplicación de las técnicas más modernas y diversas existentes en esta materia.
“Sin duda alguna estamos haciendo algo que nunca se había hecho, dando respuesta a la demanda de servicios que requieren estos niños y niñas con condiciones especiales, y permanentemente estamos promoviendo en la población el incremento de la sensibilidad y de la solidaridad, así como de mayor alerta y conciencia sobre la realidad de este colectivo infantil”, agregó la Primera Dama.
En el acto habló Tomás Ping- Fu, embajador de la República China de Taiwán, cuyo gobierno aportó 2 millones de dólares para la construcción de la obra, quien indicó que estos centros abrirán las puertas del conocimiento a los niños con necesidades especiales y contribuirán a mejorar la calidad de vida de sus familias.
La ceremonia fue bendecida por el arzobispo metropolitano de Santiago, monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio, y contó con la participación artística de un grupo de niños especiales.